Oración de la Mañana – Lunes 21 de Julio de 2025
Oración de la Mañana
Querido Dios, gracias por abrir mis ojos y permitirme ver una nueva semana. Gracias por recordarme que Tú proveerás todo lo que necesito y que no me faltará nada. Te alabo, no solo por suplir mis necesidades, sino también por la promesa de darme esperanza y un futuro.
Ayúdame a depender completamente de Ti, confiando en que siempre cuidarás de mí. Tu Palabra en el Salmo 23:3 dice: “Él restaura mi alma; me guía por sendas de justicia por amor de su nombre”.
Dios, la semana pasada fue difícil, pero te agradezco por tu restauración. Gracias por levantarme, por sanarme y por darme una nueva oportunidad. Tú nunca prometiste que la vida sería fácil, pero sí prometiste que nunca me dejarías ni me abandonarías. Te doy gracias por esa bendición tan maravillosa.
Con un corazón lleno de gratitud, te entrego esta semana. En el nombre de Jesús, Amén.
“Porque ustedes eran como ovejas descarriadas, pero ahora han vuelto al Pastor y Guardián de sus almas.” – 1 Pedro 2:25
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Dios de amor, gracias por regalarme una nueva y hermosa mañana. Te alabo por la bendición de despertar con salud, con un cuerpo y una mente en paz. Gracias, Señor, por llenar de luz este nuevo día.
Hoy, al comenzar esta jornada, pongo toda mi confianza en Ti. Te agradezco por el don de la vida, por el cielo brillante que ilumina mi camino y por la suave brisa que me recuerda tu amor paternal. Alabado sea tu amor inmenso, tu perdón sin límites y tu bondad que sana el corazón y nos guía a la verdadera felicidad.
Ilumina mi mente en cada decisión que tome y ayúdame a cumplir fielmente tu voluntad. Gracias por enseñarme a reconocer tanto mis debilidades como mis fortalezas, mis dones y talentos. Nada se compara a tu presencia, Señor, porque solo tú me das seguridad verdadera.
Te doy gracias por el regalo de este nuevo amanecer y por el canto de las aves que anuncian tu grandeza. Dame la fuerza para serte fiel en cada momento del día. Ayúdame a mantenerme firme en medio de las pruebas, para que nada me aparte de tu presencia. Ilumina cada paso que dé en esta jornada.
Que todas mis acciones tengan un propósito lleno de amor y bondad. Desde ahora te entrego mi vida para que habites en mí. Envía tu Espíritu Santo para que me guíe por caminos que me acerquen a ti y lléname con la sabiduría necesaria. Ayúdame a tomar decisiones correctas y fortaléceme para seguir enfrentando mis batallas. Aquí estoy, con el corazón abierto, listo para recibir tu bendición y tu amor.
Mi Dios, ayúdame a soltar las cargas del día a día, ese estrés que me impide ver tus maravillas. Me entrego a tus manos y confío en tus promesas. Bendigo tu nombre al comenzar esta jornada. Me abandono a ti para que se cumpla en mí tu voluntad. Acompáñame siempre, porque conoces mis luchas internas y no quiero alejarme de ti.
Me lleno de alegría en tu presencia porque sé que solo tú eres la fuente de salvación y vida eterna. Eres grande y me ayudas a superar todo lo que se opone a tu amor y tu voluntad. Gracias, Padre, por este momento de oración que me llena de paz y me fortalece con esperanza. Sé que la esperanza sigue viva y que no debo rendirme, porque tú siempre estás conmigo y me bendices sin cesar.
Concédeme la paz que nace de confiar en ti, la fuerza de tu presencia y la serenidad de saber que contigo soy vencedor. Te suplico que derrames una gran bendición sobre mí y sobre mis seres queridos, para vivir este día en plenitud. Que tu Espíritu Santo encienda dentro de mí el fuego de tu amor.
Llena mi ser con tu amor y concédeme sabiduría para realizar con entrega y cariño todo lo que hoy me proponga. Te doy gloria y alabanza, Padre Celestial, por comenzar este nuevo día en tu presencia y bajo tu bendición. Amén.
Recordaré tu presencia amorosa dentro de mí y en todo lo que me rodea, cultivando una intimidad profunda contigo en cada momento de este día.
📖 “Alaben al Señor todas las naciones, glorifíquenlo todos los pueblos, porque es inquebrantable su amor por nosotros.” – Salmo 117