Oración de la Mañana

Querido Dios, gracias por este nuevo día. Gracias por ser el único que siempre tiene paciencia conmigo. Sé que no siempre he hecho lo correcto, pero Tú nunca te has alejado de mí. Cada día sigues obrando en mi vida, incluso cuando no entiendo cómo se resolverán las cosas.

Tu Palabra en Juan 5:17 dice: “Mi Padre aún hoy está trabajando, y Yo también trabajo.” Esa promesa me llena de esperanza.

Ayúdame a recordar siempre esta verdad y a confiar en Ti cuando me sienta ansioso. Pensar demasiado roba mi paz y agota mi alegría, por eso hoy te pido que llenes mi mente con una paz sobrenatural.

En Isaías 55:8-9 dice: “Porque mis pensamientos no son los de ustedes, ni sus caminos son los míos —afirma el Señor—. Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes, ¡más altos que los cielos sobre la tierra!”

Esto me recuerda que, aunque no tenga todas las respuestas, sí te tengo a Ti… y eso es más que suficiente. En el nombre de Jesús, Amén.

📖 “El Señor cumplirá Su propósito en mí; Tu amor eterno, Señor, perdura para siempre.” – Salmo 138:8

Padre de bondad y amor, al comenzar este nuevo día, vengo ante Ti para darte gracias por el regalo de la vida y por el milagro de despertar una vez más. Hoy te pido que me acompañes con tu ternura, para que cada encuentro con mis hermanos sea un momento de paz, guiado por tu gracia y tu poder.

Amado Dios, gracias por permitirme abrir los ojos a esta nueva mañana, rodeado de tu amor y de tus bendiciones. Gracias, Señor, porque sé que siempre estás conmigo y nunca me dejas solo. Este nuevo día es una nueva oportunidad para seguir caminando contigo. Deseo buscarte con todo mi corazón, vivir con la certeza de tu presencia, y que tu bendición alcance mi vida y la vida de todos los que amo.

Gracias por las maravillas que realizas en mi vida. Confío plenamente en que todo lo puedo en Ti, porque Tú me fortaleces. Gracias, Padre amado, por escuchar mis oraciones y responderme cuando acudo a Ti con fe sincera. Sé que estás a mi lado en cada momento, apartando los obstáculos y dándome firmeza para avanzar. Hoy elijo enfrentar con valentía todos los desafíos y dejar atrás aquello que no me permite vivir en plenitud.

Quiero vivir con alegría y entregarme con amor a ser un verdadero hijo tuyo. Quiero dar lo mejor de mí en cada paso, vivir como un cristiano auténtico, fiel a mi fe y confiando en el Dios vivo y verdadero. Al comenzar esta mañana, me dispongo con entusiasmo a realizar cada tarea con alegría y buena voluntad.

[Música]
Espíritu Santo, renuévame por dentro. Haz de mí una persona nueva, firme y segura, sabiendo que me cuidas y me guías en todo momento. Señor, mi fuerza y mi refugio, me entrego a Ti con todo lo que soy y con todo lo que tengo. Toma el control total de mi vida. Gracias por habitar en mi corazón y por invitarme a ser reflejo de tu presencia entre quienes me rodean.

Todo lo que soy, que esté lleno de tu Espíritu. Que mi sentir se alinee con el tuyo y que mis acciones estén guiadas por tu amor y tu propósito. Enséñame a buscarte en lo concreto, a ser testigo de tu Palabra con mi forma de vivir, y a mantenerme firme en la fe. Que tu Reino de amor comience a manifestarse aquí en la tierra a través de obras de caridad y gestos de compasión.

Señor, no me angustia caer, si conservo el deseo profundo de volver a levantarme. Hoy te pido un corazón generoso, dispuesto a servir y a compartir con los demás todo lo que me has dado. Gracias porque me corriges con ternura y no me juzgas por mis errores, sino que me sostienes con tu misericordia, incluso cuando me alejo de tu camino.

Te doy gracias por tus bendiciones y por tu obra constante en mi vida. Confío plenamente en tus promesas. Deseo amarte cada día más y seguir firme en tu camino, pero necesito que tu Palabra habite en mi corazón. Gracias por escuchar esta oración. Mi mayor anhelo es que tu voluntad se cumpla en mi vida.

Dios misericordioso, quiero vivir en tu luz y caminar con la certeza de que estás conmigo en cada paso de este nuevo día. Amén.