Oración de la Mañana – Jueves 31 de Julio de 2025
Oración de la Mañana
Querido Dios, gracias por este nuevo día que me has regalado. Me has despertado, y eso ya es un milagro en sí mismo. Hay días en los que no me siento bien del todo, pero aun así, gracias por ser la fuente de mi alegría. Una y otra vez me has mostrado que el verdadero gozo no depende de las circunstancias, sino de conocerte a Ti.
Tu Palabra en el Salmo 16:11 dice: “Me darás a conocer la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo.” Señor, ese es exactamente el lugar donde quiero estar: en Tu presencia. Enséñame a encontrar alegría en todas las cosas, incluso en medio de mis lágrimas. No quiero que mi mente se enfoque solo en lo que está mal.
Dios, Tú eres tan bueno, y la verdad es que siempre hay algo por lo cual agradecer. Gracias por darme la fortaleza para enfrentar este día con alegría a través de Ti.
En el nombre de Jesús, Amén.
“Aunque la higuera no florezca, ni haya uvas en las vides… con todo, me alegraré en el Señor.”
— Habacuc 3:17–18
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Amado Dios, al despertar en esta hermosa mañana llena de luz y esperanza, mi alma se eleva en gratitud por tu amor infinito. Gracias, Padre celestial, por este nuevo amanecer. En este día, solo deseo recibir lo necesario para glorificar tu santo nombre y cumplir fielmente tu voluntad.
Al abrir mis ojos, comprendo una vez más que contigo es donde verdaderamente quiero estar. Solo tú das sentido eterno a mi existencia. Por eso, hoy te entrego todo lo que soy y todo lo que tengo. Gracias por regalarme una nueva oportunidad para caminar contigo.
Quiero adorarte con todo mi corazón, exaltando tu nombre y buscando cada día más de tu presencia. Te pido que me llenes de tu guía, tu paz y la fuerza necesaria para superar mis debilidades. Aunque me has dado la libertad para decidir, reconozco que solo tú conoces el camino perfecto para mí.
Te adoro, Señor, y me rindo por completo a tu amor. Abro mi corazón para que habites en él. Que mis logros no me alejen de ti, que las derrotas no debiliten mi fe, y que en medio de mis carencias nunca me falte gratitud. Que en los momentos de alegría, siempre te dé gracias por lo que eres y por cada obra que realizas en mi vida.
Anhelo avanzar con paso firme hacia la santidad, enfrentando mis pecados y fortaleciéndome espiritualmente día a día. Señor, haz visible tu poder en mi vida. Aunque los problemas no desaparecen, confío en que tú me sostienes. Lléname de tu paz y enséñame a rendirme totalmente ante tu presencia.
Protégeme y acércame más a ti. Disuelve mis temores, calma mis pensamientos, sana mis heridas y renueva mi espíritu. Jesús, entra en mi corazón, llena mi ser con tu amor, porque anhelo sentir el calor de tu abrazo. Dios de paz, dame dominio propio para no dejarme llevar por mis impulsos.
Estoy seguro de que estás conmigo, que me guías y jamás me abandonas. En ti confío plenamente, porque nada podrá derribarme mientras tú seas mi roca. Concédeme esperanza para seguir firme, amor para amarte y amar a los demás. En medio de cada lucha, dame la certeza de que tu presencia me sostiene.
Gracias, Señor, por permitirme empezar este día bajo tu bendición. Gracias por las alegrías, por tu poder, y por aceptarme tal como soy. Gracias por renovar mis fuerzas y llenar mi alma de paz para aprovechar al máximo este nuevo día.
Gracias por permitirme abrir los ojos y respirar un día más bajo tu cuidado amoroso. Ayúdame a vivir con fe, aprovechar cada momento, y reflejar tu amor en todo lo que haga. Padre celestial, te entrego este nuevo día. Sé que será bendecido, porque lo inicio bajo tu protección. Amén.
[Música]
Hoy visitaré el Santísimo Sacramento y pasaré un momento en adoración personal y en silencio ante Jesús Eucaristía, agradeciéndole por este mes que llega a su fin.
Dichosos los que habitan en tu casa, Señor, y te alaban sin cesar. Dichosos los que encuentran en ti su fuerza. — Salmo 83.
Que el Señor derrame abundantes bendiciones sobre nosotros en este día.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.